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Características de la Alta Edad Media

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Conocida como la Alta Edad Media, el primer periodo de la Edad Media se originó durante la caída del Imperio Romano de Occidente en el año 476 hasta el debilitamiento del feudalismo a principios del siglo XI. Esto se debe a que la Edad Media se ha dividido, a efectos de estudio, en dos períodos: la Alta Edad Media y la Baja Edad Media.

La Alta Edad Media se inició en un contexto histórico de crisis del Imperio Romano, cuya economía perdió su dinamismo y vio reforzada la actividad agraria.

De esta manera, los pueblos bárbaros fueron atraídos, dando lugar, con la invasión, a varios reinos dentro del Imperio Romano, ya que los reinos independientes más conocidos son los francos, los vándalos, los anglosajones, entre otros.

Características

Durante la Alta Edad Media se formaron reinos independientes a finales del siglo V, como el franco, el ostrogodo, el visogótico, el vándalo y el suevo, entre otros, gobernados por una nobleza compuesta por los pueblos germánicos, así como por sus descendientes, que invadieron el Imperio Romano.

Este periodo estuvo caracterizado por las invasiones de los bárbaros en el territorio del Imperio Romano, así como por la consolidación del sistema económico feudal. En su mayoría, los invasores eran de origen germánico, sin tener una estructura en su comunidad, por el estado.

Vivían en grupos formados por sus familias, y en las Asambleas de Guerreros, encabezadas por un rey nombrado por ellos, definían las decisiones importantes.

Todo ello fue provocado por el crecimiento de la población germana, cuyo espacio geográfico comenzó a escasear. Así, empezaron a ansiar tierras fértiles para poder expandir la agricultura, llegando al territorio romano. Debilitado, el ejército romano acaba perdiendo.

Comienza a formarse el feudalismo, con la integración de la cultura romana y germánica, y se produce la ruralización de Europa, es decir, la economía se basaba en la agricultura, con la formación de feudos, poco uso de la moneda y pocos contactos comerciales externos.

La sociedad era estatista y jerarquizada en los órdenes, siendo los pertenecientes al clero los que rezaban, los nobles los que luchaban y los siervos los que trabajaban.

Durante este periodo también se produjo un intenso fortalecimiento del cristianismo y, en consecuencia, el crecimiento de la Iglesia católica y su poder.

La cultura secular se debilitó y el teocentrismo llegó a predominar.

Fin de la Alta Edad Media

Es difícil precisar con exactitud cuándo terminó la Alta Edad Media, pero los cambios estructurales, económicos y culturales que iniciaron el debilitamiento del feudalismo fueron el resultado de varios cambios que comenzaron a producirse en Europa durante el siglo X.