Los bosques tropicales son una de las mayores biodiversidades del mundo. Estas regiones se sitúan, en su gran mayoría, en la franja entre los trópicos.
Características
Generales
- Biodiversidad rica con gran cantidad de especies vegetales y animales. Muchas de estas especies son aún desconocidas por el ser humano.
- Poseen suelos con cobertura de humus (de 30 a 50 cm), proveniente de la descomposición de hojas, frutos, heces y cadáveres de animales muertos.
- Gran presencia de sombra, pues los árboles se encuentran muy cercanos unos de otros. Estos árboles poseen, en promedio, de 30 a 50 metros de altura.
- Calor casi todo el año, con temperaturas promedias anuales de 20º C.
- Lluvias frecuentes y abundantes (1200 milímetros anuales).
- Ocupan solamente un 7% de la superficie terrestre.
Localización
La mayor incidencia de los bosques tropicales es en las siguientes regiones: África (cuenca del río Congo y Liberia), América Central, América del Sur (bosque Amazónico y bosque Atlántico), Asia (Vietnam, Laos, Camboya y Tailandia) y regiones de Oceanía (Nueva Guinea, Borneo y la costa norte de Australia).
Fauna y flora
Los bosques tropicales son biomas compuestos por gran cantidad de especies vegetales y animales, concentrando aproximadamente 50% de la vida del planeta, incluso ocupando menos del 2% de la superficie de la Tierra.
Hay por lo menos 5 mil millones de especias aún desconocidas en estos bosques. La biodiversidad es enorme ya que una hectárea de tierra concentra hasta 480 especies de árboles.
La cantidad de especies resulta de las peculiaridades del clima, humedad y presencia de luz e influencia en la disponibilidad de carbono. Cerca de 4 mil metros de bosque tropical concentran más carbono que la misma medida de cualquier otra vegetación. Entre 70% y 90% de la vida del bosque está en los árboles.
Los bosques tropicales poseen una vegetación exuberante debido a la gran cantidad de energía solar y agua que recibe, tanto que la vegetación crece durante todo el año, con árboles alcanzando hasta los 60 metros de altura.
Las hojas de los árboles son anchas, lo que facilita la absorción de luz solar sin que se deshidraten, pues el agua que la planta pierde durante su transpiración es compensada por la absorción de agua por las raíces. Las raíces de los árboles son poco profundas.
Es frecuente encontrar raíces tubulares que proporcionan una mayor fijación de la planta.
En los bosques tropicales, las copas de los árboles más altos impiden que gran parte de la luz solar llegue al interior del bosque (solo el 1% de esa energía alcanza el suelo). Eso disminuye el desarrollo de varias especies de plantas, mientras que otras (como bromelias, epífitas y helechos) se desarrollan sobre los troncos de los árboles como una forma de estar más próximas a la luz.
El suelo de los bosques tropicales es pobre en nutrientes minerales, pero el reciclado de la materia orgánica es muy rápido. Los hongos y bacterias presentes en el suelo tardan más o menos dos meses en descomponer una hoja, mientras que en un bosque templado, esa hoja tardaría de uno a siete años para descomponerse.
El resultado de esa descomposición son nutrientes minerales que son absorbidos por los vegetales inmediatamente y utilizados en la fotosíntesis y en su metabolismo. De esa forma, los nutrientes están en los vegetales, y no concentrados en el suelo.
En cuanto a la fauna, se pueden encontrar muchos animales vertebrados como mamíferos, reptiles, anfibios, aves e invertebrados como los insectos. Por vivir en un clima caluroso y con abundancia de agua, los organismos que viven allí están siempre en actividad.
Composición
Los bosques tropicales están divididas en por lo menos cinco capas que son diferentes y que varían de bosque en bosque:
Cielo: la capa llamada “cielo” abarca las coronas de los árboles espaciadas y sus ramas.
Copa: la capa denominada “copa” está formada por árboles de corto espaciado y densidad elevada.
Sub: en esta capa, más espaciada, están presentes las especies arbóreas que llegan a los 100 metros de altura ubicándose de manera espaciada.
Arbustiva: los arbustos son la razón de la denominada “capa arbustiva”, con árboles más pequeños, de 5 a 20 metros por encima del piso.
Piso: es esta capa está la vegetación de menor porte, además de troncos y hongos.
Dosel
Entre las peculiaridades de los bosques tropicales húmedos está la estructura denominada dosel, formado por follaje, ramas secas y otros residuos vegetales superpuestos que se depositan en el suelo. El dosel puede exceder los 25 metros de altura y en él está concentrado hasta el 70% de la vida del bosque.
En el dosel viven animales como sapos, pájaros, cobras, felinos y monos. Las características del dosel cambian en el transcurso del día, siendo más seco y caliente que en otros lugares del bosque.
Piso
Otra estructura del bosque tropical húmedo se llama “piso”, un lugar oscuro y húmedo, abajo del dosel. En el piso del bosque, en constante sombra, ocurre la descomposición de materiales por hongos y microorganismos que descomponen plantas y animales muertos.
Es un proceso de reciclado de material que permite la vida en el bosque, la presencia de nutrientes y supervivencia de las plantas. En esta parte del bosque se encuentran animales como grandes felinos, tapires y elefantes.
Otras
Lamentablemente, los bosques tropicales están siendo muy destruidos por el hombre. Cuando esto sucede, se pierden la protección natural contra la erosión causada por el viento, agua y otros factores.
Con la tala de los árboles, el agua de la lluvia arrastra todos los nutrientes minerales hacia el fondo del suelo, proceso que se llama lixiviación, volviendo esos nutrientes innecesarios para la planta, lo que reduce su fertilidad.
Además de eso, la tierra que sale de la erosión es llevada al fondo de los ríos, provocando la acumulación de sedimentos y causando inundaciones.
Con la destrucción de los bosques tropicales, además de perderse la protección del suelo, se pierden también miles de especies vegetales y animales.
Con respecto a la atmósfera, la importancia de los bosques tropicales se encuentra en su función de bajar las temperaturas, funcionando como una especie de aire acondicionado.
Además de eso, ese bioma tiene la propiedad de “bombear” las aguas de las lluvias y del subsuelo hacia la atmósfera, en un proceso conocido como evapotranspiración, que proporciona humedad que se desplaza hacia otras áreas.