
También conocida como civilización minoica, la civilización cretense fue la que se desarrolló entre los años 3.000 a.C. y 1.400 a.C. en la isla de Creta.
Características
- Economía basada principalmente en el comercio marítimo. También se practicaba la agricultura, principalmente el cultivo de la vid, el olivo y el trigo.
- Periodo relativamente pacífico (se registran pocas guerras o conflictos sociales).
- Periodo marcado por la construcción de importantes palacios reales. Podemos citar como ejemplos: Palacio de Cnosos, Palacio de Festo y Palacio de Malia.
- Tenían una religión politeísta (varios dioses y diosas). Las principales deidades eran figuras femeninas vinculadas principalmente a la fertilidad. Por lo tanto, podemos decir que era una religión matriarcal. De esta manera, la religión minoica se basaba en el culto a la Gran Madre, representante de la fertilidad y de la tierra.
- En cuanto a la política, el poder se concentraba en manos del rey. También fue una importante figura del poder jurídico y religioso.
- En cuanto a las artes plásticas, podemos destacar la importancia y la belleza del arte cerámico minoico. Los frescos de los palacios reales también eran importantes (representaban escenas cotidianas), así como la fabricación de joyas con oro y piedras preciosas.
Curiosidades
- El término «minoico» fue dado por el arqueólogo inglés Arthur Evans, en referencia a Minos (mítico rey de la isla de Creta).
- La civilización cretense se desarrolló con un gran e importante contacto con la antigua Grecia. Muchos historiadores consideran que forma parte de la antigua civilización griega.
- El toro era una especie de animal sagrado para los cretenses. Era muy común realizar bailes y actividades corporales con la presencia de toros.
- Muchos palacios cretenses fueron destruidos en el siglo XVII a.C., tras un terremoto provocado por la erupción del volcán Santorini.