Las luchas constituyen una de las principales unidades en torno a las cuales se organizan los contenidos de la educación física. En esta unidad se encuentran los deportes de combate, una de las categorías de esta organización. Por ello, este artículo explica qué son estos deportes, además de presentar las características.
¿Qué son los deportes de combate?
Antes de comentar sus orígenes, es importante entender que el término deportes de combate se utiliza para referirse a las prácticas en las que hay un enfrentamiento directo entre dos oponentes, con o sin el uso de instrumentos.
Sin embargo, estas prácticas, algunas de las cuales se presentarán en este artículo, consideran un conjunto de normas y reglamentos instituidos por entidades deportivas específicas, de lo que resulta su carácter deportivo e institucionalizado.
Además de estos elementos, los deportes de combate están fuertemente marcados por la imprevisibilidad en la dinámica del enfrentamiento, es decir, por la inversión constante de las condiciones de ataque y defensa entre los adversarios.
En este sentido, cabe señalar que las prácticas a las que se refiere esta terminología también se refieren a los deportes de combate, a pesar del creciente desuso de esta terminología.
El énfasis relativamente reciente en el uso de la expresión deportes de combate es una alternativa a la expresión luchas para referirse a las prácticas de enfrentamiento entre oponentes.
De esta manera, se entiende que representa un movimiento que busca legitimarlos en el escenario deportivo. Se trata, por tanto, de un término que pretende delimitar el carácter institucionalizado y deportivo de las luchas, buscando desvincularlas de los estigmas de violencia que se les atribuyeron históricamente.
Características de los deportes de combate
Como se ha mencionado anteriormente, los deportes de combate tienen diferentes características, que varían según las técnicas de combate, el espacio en el que se producen y los fundamentos en los que se basan. Sin embargo, en términos generales, se pueden destacar las siguientes características de los deportes de combate:
- Constituyen prácticas de corta, media y larga distancia.
- Los combates se realizan siempre de forma individual, teniendo como objetivo central la superación del adversario.
- Alternan constantemente entre condiciones de ataque y defensa, utilizando acciones técnicas y tácticas para superar al adversario.
- Consisten en prácticas que pueden realizarse con el uso de instrumentos de combate (espadas, palos, guantes) o sin ellos (técnicas cuerpo a cuerpo).
- Exigen a los combatientes diversas habilidades, como: destreza, agilidad, fuerza, concentración, estrategia y acondicionamiento físico y mental;
- Se basan en técnicas de golpeo (toques, contusiones, desequilibrios, agarres, giros, inmovilizaciones y manejo de armas) y/o en la exclusión del área de combate.
Origen de los deportes de combate
Se sabe que a lo largo de la historia de la humanidad se han librado diferentes formas de combate, relacionadas, sobre todo, con la supervivencia y el desarrollo de la especie. Así, en el transcurso de la evolución, estas formas de combate estaban relacionadas con la caza por el alimento y las disputas por el territorio, principalmente.
Sin embargo, la mayoría de las disciplinas tratadas aquí eran formas de demostración de poder entre pueblos y naciones, constituyendo sistemas de entrenamiento para la guerra, por ejemplo.
A pesar de ello, es posible rescatar en la Antigua Grecia del siglo VII a.C. las primeras formas de combate disputadas con fines deportivos.
En esta época, los luchadores se dedicaban a la práctica del pancracio, una de las pruebas del pentatlón de los Juegos Olímpicos Antiguos.
Era una forma de combate cuyas técnicas incluían puñetazos, codazos, rodillazos, patadas, torsiones e inmovilización de articulaciones. Sin embargo, no está permitido morder al adversario, arañarlo o sacarle los ojos.
A pesar de este hito deportivo-competitivo, es importante entender que los deportes de combate tienen orígenes, historias y características específicas. Por lo tanto, las peleas varían tanto en las técnicas y espacios de combate como en los contextos en los que se formaron como tales.