El enlace covalente es un tipo de unión química que ocurre con la compartición de pares de electrones entre átomos que pueden ser el hidrógeno, no metales o semimetales.
Según la Teoría o regla del octeto, los átomos de los elementos se vuelven estables cuando alcanzan la configuración electrónica de un gas noble, o sea, cuando estos poseen ocho electrones en su capa de valencia (capa más externa) o dos electrones, en el caso de poseer solamente la capa electrónica K.
Así, siguiendo esta regla, los átomos de los elementos mencionados tienen la tendencia a ganar electrones para alcanzar la estabilidad. Por ejemplo, el hidrógeno en el estado fundamental posee solamente un electrón en su capa electrónica; así, para volverse estable, este necesita recibir un electrón más proveniente de otro átomo.
Para que se dé a cabo una unión covalente existen algunas condiciones:
- Poseer pequeñas diferencias de electronegatividad entre los átomos unidos.
- Los átomos que se unen necesitan ganar electrones, así, ninguno estará dispuesto a ceder.
Para lograr la estabilidad, este tipo de átomos comparte electrones y eso sucede entre:
- No metales con no metales.
- No metales e hidrógeno.
- Hidrógeno con hidrógeno.
Características
Los enlaces covalentes presentan las siguientes características:
- El enlace covalente está caracterizado por el compartición de electrones entre dos átomos. Esos átomos unidos pueden formar moléculas o sólidos covalentes. Esa compartición ocurre debido a la atracción de los electrones por los núcleos vecinos.
- Estos enlaces se clasifican en: molecular, dativo o coordinado.
- Este tipo de uniones se lleva a cabo entre átomos con electronegatividades altas y similares.
- Estos enlaces ocurren entre dos no metales.
- En este tipo de enlace se necesita mucho gasto de energía para poder arrancar el electrón.
- Todos los átomos que forman parte de este tipo de unión tienen que ganar electrones para que se pueda alcanzar la estabilidad y así completar los ocho electrones de la última capa de Valencia, según la regla del octeto.
- Cuando este tipo de unión ocurre entre un no metal con el hidrógeno, uno necesita del otro para conseguir alcanzar su estabilidad. En este caso el hidrógeno no pierde su electrón, sino que comparte electrones con otro elemento.
- Las sustancias moleculares generalmente son líquidas o gaseosas y no son buenos conductores de la electricidad.
- Las sustancias covalentes en condiciones ambientales pueden encontrarse en estado líquido como es el caso del éter. También se pueden presentar en estado sólido como la parafina o en estado gaseoso como el dióxido de carbono. Estas poseen bajos puntos de fusión y ebullición, a diferencia de las sustancias iónicas en las cuales son muy altos.
- Todos estos enlaces son más fuertes si se comparan con otro tipo de uniones químicas como es el caso de los enlaces iónicos.
- En las uniones iónicas los iones se mantienen unidos a través de la atracción coulómbica no direccional, mientras que en las uniones covalentes estas son altamente direccionales.
El átomo también tendrá que encontrar el equilibrio durante el enlace covalente, porque en distancias más grandes que en el equilibrio los átomos se atraen y en distancias más pequeñas se repelen, debido a la presencia de las fuerzas del núcleo.
En los enlaces covalentes, los electrones quedan simultáneamente entre los átomos. Los compuestos provenientes de enlaces covalentes son denominados moléculas, que son estructuras eléctricamente neutras.
Por no haber ganancia o pérdida de electrones, la estructura molecular no posee cargas. El agua (H2O) es un compuesto molecular determinado por la unión de dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno.