La selva amazónica es mundialmente conocida por la expresividad de su extensión, constituyendo el mayor dominio natural de Brasil, y siendo reconocida como la selva con mayor biodiversidad (variedad del medio natural) del mundo.
Dicha selva está adaptada al clima ecuatorial, con altas temperaturas y humedad, y abundantes precipitaciones.
La selva amazónica no sólo está presente en territorio brasileño, sino también en partes de Venezuela, Colombia, Perú, Bolivia, Ecuador, Surinam, Guyana y también en la Guayana Francesa.
De esta manera, se puede ver la importancia de la selva amazónica para Brasil, pero no sólo para Brasil, sino también para todo el planeta, ya que esta importante zona forestal ha sido llamada el «pulmón del mundo» por su capacidad de filtrar oxígeno.
Esta idea, muy extendida desde hace años, ya ha sido desmitificada por los investigadores que afirman que la mayor producción de oxígeno no proviene de la selva, sino de las algas marinas.
Según estos investigadores, los árboles de la selva como la amazónica producen mucho oxígeno, pero lo consumen casi todo.
De cualquier forma, la importancia del Amazonas para la conservación de las numerosas especies que se desarrollan en este tipo de selva es innegable.
Todos los biomas sufren la interferencia humana, que altera sus propiedades naturales con diversos fines. Con el bioma Amazónico no podía ser diferente.
A lo largo de los años, la Amazonia ha sufrido varias intervenciones, tanto por la presión ejercida por la población como por la instalación de empresas agrícolas y ganaderas y de extracción de minerales, así como por la ejecución de proyectos de generación de energía.
En las últimas décadas, la selva amazónica ha sido devastada para la plantación de soja, así como para la ganadería.
La deforestación de la misma es uno de los problemas medioambientales contemporáneos más debatidos, aunque sigue produciéndose constantemente de forma ilegal.
A pesar de la vigilancia, incluso por satélite, la extensión de la selva amazónica dificulta el control de su inmensidad. Para más información, puedes acceder al sitio del Instituto de Investigación Ambiental de la Amazonia.
Características
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Flora
La selva amazónica está compuesta por varios tipos de plantas, así como por una gran variedad de especies de fauna.
Los árboles están siempre verde, ya que las hojas están acostumbradas al clima húmedo, y los árboles no pierden sus hojas en invierno (perennes).
La heterogeneidad de la selva amazónica se compone de Selva de Igapó (se da en suelos bien inundados, principalmente en ríos de aguas blancas), Selva de Várzea (árboles grandes, especialmente en ríos de aguas negras), Selva de Tierra Firme (presente en las tierras altas, árboles grandes) y Campinaranas o Caatingas del Río Negro (árboles más pequeños, con troncos más delgados y espaciados).
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Suelos
El tipo de suelo presente en la selva amazónica está relacionado con la elevada pluviosidad y las altas temperaturas. Se trata de suelos con baja fertilidad natural, con escasa capacidad de nutrientes.
Para que este tipo de suelo produzca otras especies de plantas no autóctonas, suelen ser necesarios productos químicos para equilibrar las propiedades del suelo, haciéndolo más fértil.
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Fauna
La fauna de la selva amazónica es rica en especies, aunque la densidad del bosque oculta gran parte de los animales existentes.
Hay muchos mamíferos, aves, reptiles, peces e insectos que sobreviven gracias a los recursos que ofrece el bosque.
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Hidrografía
El Amazonas tiene la cuenca hidrográfica más grande del mundo, la Cuenca Amazónica. El principal río de la cuenca es el Amazonas, el más grande del mundo en longitud y volumen de agua.
Los ríos del Amazonas tienen la mayor diversidad de fauna fluvial del mundo, con más de 1500 especies de peces registradas.
Por lo tanto, la preservación de la selva amazónica es también la garantía de supervivencia de varias especies vegetales y animales que se desarrollan en ella.
Además, hay varios pueblos indígenas y ribereños que dependen del lugar para su subsistencia, tomando de él los recursos que necesitan para sobrevivir.