Un texto argumentativo es el contenido de una escritura cuya característica principal se basa en el análisis de ideas, es decir, se trata de un tipo de razonamiento.
Características
Aspectos
En general, cualquier texto de esta naturaleza presenta tres aspectos:
- Una idea principal o tesis.
- Un conjunto de razones o argumentos que explican y prueban la tesis.
- Una síntesis o conclusión para reafirmar la tesis inicial.
Objetivo
Los textos argumentativos presentan como principal objetivo el convencimiento del lector con relación a las ideas que se presentan en su contenido, por lo que debe ser claro y presentar riqueza léxica.
El texto de este tipo puede ser trabajado con respecto a cualquier opinión, pero profesionalmente es bastante usado en el área del derecho, por ejemplo. Pueden ser escritos a partir de la disertación objetiva, en tercera persona del plural, o de la disertación subjetiva, en primera persona del singular.
Cuando se construye a partir de la disertación objetiva, el autor no se identifica con el lector, presentando argumentos de forma impersonal, proporcionándole al texto la sensación de imparcialidad, aunque expresando la opinión del autor.
En cuanto a la disertación subjetiva, se utiliza, como se mencionó anteriormente, la primera persona del singular, de forma que queda bastante evidente que la opinión es del autor del texto (aunque con el uso de la disertación objetiva también se deja en claro la opinión del autor).
Es importante recordar que, a pesar de que hay dos formas de construcción del texto argumentativo, se debe elegir una y seguirla hasta el final. El texto disertivo objetivo, cuando se lo aplica a la argumentación, ayuda a construir un texto más fuerte, dando la impresión de que la opinión es de todos, y no solo del autor.
Construcción
El texto argumentativo se construye a partir de un párrafo inicial, corto, que presenta la idea, pero sin dejarla clara. A partir de entonces, el autor debe pasar a desarrollar sus ideas, haciendo uso de argumentos verdaderos, fundamentados y convincentes, pudiendo incluso hacer uso de ejemplos claros.
Es necesario, además, que contenga contraargumentos, para que no haya una interpretación dudosa del contenido presentado. La conclusión se da por medio de un párrafo en el que expresamos la idea clave de la opinión, presentando una conclusión o una respuesta a lo que se presentó en el primer párrafo introductorio.
Estructura
Por lo tanto, definimos la estructura de los textos argumentativos como la introducción, en la que presentamos la idea principal, el desarrollo, en el que fundamentamos y desarrollamos lo que se presentó al principio, y finalmente la conclusión, que presenta una posible solución o una propuesta o síntesis para el texto.
Argumentos
Los argumentos que componen un texto argumentativo y que se usan en la construcción y fundamentación del mismo, pueden ser de comparación, datos históricos, datos estadísticos, investigaciones, causas culturales o socioeconómicas, testimonios, entre otros, siempre y cuando ayuden a fortalecer con fundamento la opinión defendida por el autor.
Ejemplos
Para entender mejor lo que son los textos argumentativos, vamos a dar algunos ejemplos: ensayos filosóficos que defienden una idea con argumentos; ensayos científicos que explican propuestas a partir de datos, estudios y pruebas; monografías históricas con visiones de determinados hechos; artículos de opinión; manifestaciones de grupos profesionales defendiendo sus intereses; entre otros.